Un equipo de arqueólogos de la Universidad de Colorado (EE UU) descubriò en la isla Cook, situada en la península antártica argentina un extraño artefacto metálico de origen desconocido, cubierto por unas losas de protección con unas escritura o símbolos enterrado bajo el hielo. En una pizarra contigua encontramos una especie de traducción de parte de esos símbolos...
Luego de arduo trabajo para intentar descifrarlos llegamos a la conclusión que no eran símbolos sino constelaciones que señalaban un punto en el Universo. Gracias al Dr Frank Smith,especialista en física cuántica y teórico especializado en viajes espaciales, conseguimos activar el dispositivo y crear una distorsión gravimetrico-temporal estableciendo un agujero de gusano con la otra punta del universo conocido.
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